«Debería darle vergüenza»: Alejandra Rubio ve las fotos de la infidelidad de Edmundo Arrocet a María Teresa Campos
El plató de Fiesta ha vivido un momento muy complicado para Alejandra Rubio en pleno directo al descubrir la doble traición de Bigote Arrocet y Gustavo -el chófer de María Teresa Campos- a su abuela. Han sido una fotos la que han provocado la indiganción de la colaboradora, que ha explotado dejando claro que era toda una humillación para su recuerdo.
El programa contaba con la visita de Raúl García, un paparazzi que en su momento consiguió las fotos en las que pilló al humorista en compañía de otra mujeres que no eran la presentadora. Todo ocurrió en el llamado pisito de Bigote, el lugar en el que tendría esos encuentros a espaldas de la que era pareja.
«Tengo unas imágenes que no se han visto nunca y os las voy a enseñar, para que veáis con vuestros propios ojos a Edmundo Arrocet y comprobéis que la supuesta persona de confianza de María Teresa Campos (Gustavo Guillermo) era conocedor de los hechos», así lanzaba la bomba el fotógrafo.
Lejos de estar engañada, María Teresa habría tenido conocimiento de estas imágenes y fue ella la responsable de guardarlas en un cajón después de pagar una gran cantidad de dinero, tal y como apuntaba Aurelio Manzano. Se trata de una práctica habitual en el mundo del corazón, por lo que no tendría nada de extraño que hubiera sido así.
Tras poder ver esas fotos todo el equipo llegó el momento de que Alejandra pudiera comprobar con sus propios ojos si de los que estaban hablando era cierto. Para su desgracia, comprobó que Edmundo y Gustavo estaban compinchados: «Se le tendría que caer la cara de vergüenza, a él y al chófer».
Edmundo se defiende
Tras estos comentarios, el programa conecto con el humorista por teléfono para dejarle la oportunidad de defenderse, algo que hizo atacando a todo el clan Campos. En primer lugar salió en defensa del chófer, que ahora mismo se encuentra en la casa de GH VIP 8 como concursantes. «De Gustavo yo tengo muy buen recuerdo, él es quien más sabe de la vida de Teresita, porque ahí conocíamos lo que sucedía los que estábamos 24 horas al día, no los que pasaban una o dos horas por la casa», dijo.
Sobre sus presuntas salidas y viajes sin María Teresa Campos, el humorista tiene una versión muy distinta. «Yo le decía que se viniera conmigo, pero ella no quería por su miedo a volar, cuando ella no se venía conmigo yo estaba todo el tiempo en contacto con ella, le hacía videollamadas y le mandaba fotografías», de esta forma justificaba que era imposible que le hubiera sido infiel.